Sabía que antes o temprano sucedería, pero no me puse la suficiente protección y rompí todas mis reglas, acepté todas las señales como credo universal y me desprendí de las cuchillas, ahora tengo las muñecas hinchadas y pese a todo no me arrepiento y siento la incertidumbre más inherente a él que a nosotros y siento que ahora el Gato soy yo y podría encontrar el camino con los ojos cerrados, sin necesidad de pistas de ningún tipo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario