miércoles, noviembre 16, 2005

Caminos comunes

Tengo tres gatos, aunque viven con mi madre y cuido de una gata cuyo nombre proviene de una diosa que una vez convirtió a los hombres en cerdos. La casa en la que vivo no es mía, pero es lo más parecido a un hogar que haya tenido nunca, aunque esté llena de libros y papeles y no tenga un zapatero para mis botas. En el salón no hay cortinas, pero así doy rienda suelta a mi vena exhibicionista y me permite seguir buscando a un hombre que me dure lo suficiente como para colgarme el palo de las cortinas que guardo en otro cuarto, a buen recaudo de hombres que sólo entrarán a mi habitación, nunca más de tres veces.
Tengo la voz rota, desgarrada, pero todos los que me aman de verdad acaban amando mi voz más que ninguna otra parte de mí. Casi fui cantante de boleros, casi fui la chica de una estrella del rock, casi aprendí a tocar la guitarra, casi conocí a un pianista por un anuncio que casi puse en la sección de contactos. Una vez crucé el espejo durante un concierto. Algún día casi protagonizaré una película.
Por su parte ella antepuso el bienestar de sus gatos a cualquier necesidad propia y quizás alguna vez los visite furtivamente. Y aunque no tenga una Circe, tiene un oso gigante junto al que teje y desteje y que hace de guardián en su Itaca amarilla y la protege de pretendientes de tres al cuarto.
Y tiene una voz hermosa y risueña, justo como la imaginaba antes de oírla y cuando habla suena como a bossanova. Y algún día cantaremos juntas Love will tear us apart y nos reiremos del conejo blanco.
Y nos ayudaremos en el vuelo y en el aterrizaje...

6 comentarios:

Golfo dijo...

Llevo desde las primeras líneas esperando a bajar para dar las gracias a esa diosa.
¿aunque? esté llena de libros... ¡porque! está llena de libros... al menos en mi caso, que por lo demás es una caso común.
Tres Veces casi nunca me es suficiente... cualquiera que se haya merecido llegas hasta aquí...
Como díría un poeta, en el casi tienes usted si mayor encanto.
Mmmmm, sospecho que tiene usted la suerte de estar protegida por uno de esos increíbles seres que vigilan las fronteras entre el cielo y la tierra desde una torre... y suelen presentarse en forma de paya dulce o de gusano.
Buenos días.

Golfo dijo...

erratas: llegar, su mayor encanto...

Anónimo dijo...

Qué bien, reina, qué bien.
Ole, ole y ole.

Y si no, que venga Gretelgris y lo diga.

Azena dijo...

precioso, niña, yo también amo tu voz... y tus palabras

Srta. Experimental dijo...

Why is the bedroom so cold
Turned away on your side?
Is my timing that flawed,
Our respect run so dry?

Ciro Estrada Lechuga dijo...

Bueno. Viva la madre patria. Viva Europa. Viva México. Inicio mi blog, estoy contento. Saludos, Ciro.