Yo no lo ví porque pasé el día entero en el Hospital, pero S. estaba en casa cuando pasó, me dijo que quedó en el suelo una mancha que parecía sangre, imagino que serían como las que mi madre dejó en las escaleras de casa, aquel tomate que aún era apetecible y hermoso por fuera, estaba completamente podrido por dentro, al igual que lo estaba mi madre por dentro hasta la operación, supongo que por eso me desmayé, creí que llegaba el final y me asusté mucho, no supe ver que ese espacio se me quedaba pequeño y era la salida a un mundo más grande...
1 comentario:
Un tomate es un lugar hermoso, pero demasiado pequeño. Pronto resulta incómodo y necesita romperse. Sí, también los tomates se rompen cuando están huecos por dentro... pero es sólo eso, la salida a un mundo inmenso, un mundo que sin embargo también terminará por quedarse pequeño.
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