domingo, mayo 06, 2012

(Mi) crimen perfecto

Me ha llevado unos días, pero lo he conseguido, he matado a la parte de mí que aún creía en ti, en nosotros.
No ha sido fácil, se resitía; gritaba, lloraba, aullaba, pataleaba y hasta me pegó algún mordisco. Pero ya no tenía nada que hacer, yo era mucho más fuerte.
Lo primero que hice fue ponerla frente al espejo, ahí gané el primer round. Luego la fui desnudando y ridiculizando, escupí sobre esa herida autoinflingida que usaba de escudo. Y después, le arranqué sin piedad sus órganos vitales: la fantasía, la fe, la esperanza y el deseo. Se puso todo perdido, la sangre salpicó hasta las paredes de la casa tomada, pero en cuanto dejé de oír su respiración me puse a limpiar los restos de aquel suicidio.
Tuve que usar varios productos y frotar mucho, pero conseguí que todo quedara inmaculado, más limpio de lo que nunca había estado.
Después, por fin, pude abrir esa puta puerta.

2 comentarios:

dEsoRdeN dijo...

Este tipo de sangrías son taaaan recomendables...

(no conocía a Jonna Gault y me ha fascinado! Me he acordado de la gran Timi Yuro...)

Fernanda Sandoval dijo...

Algunos asesinatos son necesarios, tan fácil como eso.