domingo, febrero 13, 2011

Nuevos planes, idénticas estrategias

Escucho música animada,
trazo ambiciosos planes,
aprendo cosas a diario,
paso tiempo con amigos.
Hablo mucho,
pienso en cosas alegres,
sonrío a menudo,
me masturbo compulsivamente,
abro puertas,
bebo con moderación
y hasta cocino.
Flirteo,
me acuesto con otros
y escribo todo lo que se me pasa por la cabeza.

Pero hay momentos en los que me paro un segundo
y recuerdo
y cuestiono
y reniego
y entonces
no puedo parar de llorar.

5 comentarios:

begusa dijo...

sumergirse en mundos ajenos ayuda a olvidarte de los relojes... y si ves que te empiezas a doblar como un papel... prueba a salir corriendo de casa como si te persiguiera el malo de una peli...

Bellota dijo...

Dicen que cuando pierdes algo hay una época de duelo. Al final consiste es saber afrontar el cambio de la mejor manera posible. Si hay que llorar, pues se llora. Pero sin dejar de sabr que es una mala etapa, y que igual que empezó, terminará. Animo!!

Miss Migas dijo...

Ha sido de rebote, pero he llegado aquí y me he encontrado con una Tauro en el País de las Maravillas. Qué tan YO!
Hay veces que lo dejas de controlar todo por un momento, y en algunas ocasiones el cambio es rápido, en otras conlleva largos pasos de cebra.... pero lo importante es que se llegue al otro lado. no?

Great!

Anónimo dijo...

Estrategias fatales, testamentos traicionados, virajes voraces, leyendas de pasión, planes integrales; idénticas torturas, similares castigos, códigos distintos, mareas pertinaces de un mismo aliento sin espejo. En fin, que estoy de acuerdo, es necesario masturbarse y levantar la bandera.

Siempre a sus sagrados pies, suave como el légamo que serpentea hacia el oscuro lecho de la vida, desde la selva oscura del alma hecha desenfrenado cuerpo.

peter dijo...

la doble vida, todo el mundo la lleva. cuando consigues llorar y reír a la vez es cuando las cosas cambian de color...

aunque también está la vía rápida, pero a la mañana siguiente te puede explotar la cabeza.