martes, septiembre 17, 2013

1+1=25

Como te echo de menos y estás muy lejos,
me pongo desnuda frente al espejo
y cuento, ceremoniosamente,
todas las marcas que me has dejado
las del cuello,
las del pecho,
los brazos, la espalda, el culo
y los muslos,
siguiendo siempre ese mismo orden.

Y mientras echo de menos tus manos y tu boca,
pienso en que alguien debería inventar el trombocid inverso
para prolongar la duración de las marcas del amor.


1 comentario:

dEsoRdeN dijo...

como inventen eso, saldrán yonkis del Trombocid de debajo de las piedras...

(temazo!)