domingo, agosto 17, 2008

Hasta mañana (segunda parte)

Tu voz negra habita en mí para siempre
y yo nunca sé despedirme de ti.
Sueño contigo cuando duermes a mi lado
y yo nunca sé despedirme de ti.
Los Leningrad Cowboys vienen a buscarte
y yo nunca sé despedirme de ti.
Lloro láminas de coca que arañan mis mejillas
y yo nunca sé despedirme de ti.
Pienso en pedirte que te quedes un rato más,
pero yo nunca sé despedirme de ti.
Así que sonrío y te acompaño hasta la puerta
como si me despidiera de ti todas las mañanas,
aunque yo nunca he sabido despedirme de ti...

http://graceenelpaisdelasmaravillas.blogspot.com/2006/09/hasta-maana.html



Han pasado 2 años y al fin he aprendido a despedirme de ti. Sólo 2 años, no 4 como calculé al volver a verte. He aprendido no se cómo, dónde, ni de quién a despedirme de ti. He aprendido mucho en estos 2 años, supongo que por eso que parecen 4. Tal vez la próxima vez que nos veamos, dentro de 2 ó 4 años haya aprendido algo nuevo, haya aprendido a olvidarme de ti.

Tu vida está a 700 km de la mía
pero yo nunca pude olvidarme de ti.
Luego están ella
y ellos,
pero yo nunca puede olvidarme de ti.
Dos espacios, dos tiempos, dos mundos
pero yo nunca pude olvidarme de ti.
Tal vez no volvamos a vernos,
pero yo nunca pude olvidarme de ti.